Escultura de madera hecha a mano de antílopes africanos (par), "Antílopes Bambara"

A través de las ventas de NOVICA, George ha podido pagar la educación de sus hijos y verlos crecer y tener éxito en sus carreras. Aunque ya no necesita mantener a sus hijos, todavía mantiene a su nieta y a su esposa. Cada pedido tiene un impacto en la vida de Georges porque lo ayuda a cuidar a su amada mientras ella se recupera de su derrame cerebral.

George crea todas sus obras con la misión de preservar, promover y desarrollar. Su deseo de preservar se puede ver a través de la madera de origen local que utiliza y sus aprendizajes, donde enseña técnicas tradicionales y ayuda a los talladores a aprender nuevas habilidades. Promueve y desarrolla sus diseños mediante la incorporación de símbolos antiguos y narraciones en tallas más modernas. Espera que su éxito y sus diseños alienten a las generaciones futuras a practicar la talla y aprender sobre sus antepasados.

George fue uno de los primeros artistas de NOVICA en África Occidental. Aunque para George es importante tener ingresos sostenibles, su principal objetivo es compartir su don con el mundo. Él ve las ventas como una forma de agradecimiento a este regalo. En opinión de George, el aprecio por su arte ha ido creciendo cada año a medida que vende más y más de sus tallas de madera africanas.

En 1981, la esposa de George tuvo dos embarazos ectópicos. Sobrevivieron financieramente con la ayuda de los ingresos de George de NOVICA y pudieron recuperarse como pareja y familia. En 2018, la esposa de George sufrió un derrame cerebral y ahora la pareja está usando sus ingresos de NOVICA para cubrir sus facturas médicas mientras se recupera.

George ha capacitado a varias personas que ahora pueden mantenerse a sí mismas y a sus familias. George también contrató a dos de sus antiguos aprendices para que fueran sus asociados y le permitieran mantenerse al día con el volumen de sus pedidos.

George Obeng ha recibido 3 microcréditos con 0% de interés de Kiva y Novica, el primero por $1000 y el más reciente por $1000. Las ganancias se utilizaron para comprar nuevas herramientas y equipos para su taller.

Este artista es un maestro veterano y continúa practicando activamente su oficio.

El trabajo de George apareció en el periódico Spectator el 12 de abril de 1986.